Entradas

Mostrando entradas de junio, 2010

La increíble historia de Michela

Imagen
Michela, en la actualidad religiosa de la Comunidad Nuovi Orizzonti, tiene una vida de película. Abandonada por su madre cuando era un bebé, atrapada por una peligrosa secta satánica, convencida de la necesidad de asesinar a una monja por indicación de la sacerdotisa que a la vez era su psiquiatra... Cuando se experimenta el amor de Dios, se aprende que no se puede guardar para uno mismo. Yo llevo diez años viviendo esta forma de amor. Llevando el amor a quienes no conocen el amor de Dios. «Chiara, sácanos de este infierno» La comunidad a la que pertenezco nació en 1984, fundada por Chiara Amirante , que comenzó a llevar la palabra de Dios a los puntos de muerte de la ciudad de Roma. Tantos jóvenes que no conocían la palabra de Dios le pedían: «Chiara, sácanos de este infierno». No creía absolutamente nada en Dios Yo llevo doce años en la comunidad. Tengo 40, pero cuando entré, no creía absolutamente nada en Dios. Creía que los sacerdotes y las religiosas se hacían sacerdote

La última cima

Hay que hacer lo posible por ver esta peli.

María, que ninguno se pierda

Imagen
María, madre, hoy quiero poner delante de ti mis preocupaciones, sobre todo una, que tú sabes bien. ¿Por qué será tan difícil educar a los hijos? Señora, tú, que también has sido madre, y sigues siéndolo de cada uno de nosotros, No desoigas mi súplica. Tú, que cuidaste a Jesús, y le diste forma interior, Le moldeaste como unas manos moldean la arcilla Ayúdame, ayúdanos a tocar el corazón de nuestros hijos, ayúdame a orientarlos, a consolarlos, dame fortaleza, paciencia y discernimiento. Tú, Señora, que acogiste a Jesús, le curaste, le vendaste cuando Venía llorando por esos caminos de tierra… Tú que le abrazaste y fuiste su roca, en medio de la tempestad No desoigas la súplica de esta madre, y de todas las madres que como yo, tienen el corazón inquieto. Señora, que ninguno de mis hijos se pierda. Acógelos como hijos tuyos, bajo tu manto. Hoy, con nombre y apellido, te los hago presentes… Los míos y los de tantas madres afligidas, en tensión por unos hijos a lo

Y tú, ¿cuándo te has encontrado con Él?

Echo la vista atrás y pienso en la cantidad de sacerdotes que he conocido a lo largo de mi vida... unos cuantos... y de todos ellos, ninguno me ha escandalizado. NINGUNO. Al contrario, cada uno en particular ha intentado acercarme a Cristo, que me encontrara con Él. En este momento recuerdo a uno en particular que, de alguna forma, me hizo tomar conciencia de que existe una verdad que no es perceptible con los ojos de la carne aunque sí con los del corazón. Este sacerdote, sólo con una frase, me hizo pararme ante una realidad, la de Cristo resucitado, cuando yo todavía estaba debatiéndome con mi hombre viejo. Recuerdo que por aquel entonces había hecho un taller de oración (el del Padre Larrañaga) y aquello me había tocado bastante... de alguna forma el Señor ya se estaba haciendo presente en mi vida. Digo que, en esa ocasión, había ido a una boda de unos conocidos a una parroquia de la que ni me acuerdo del nombre; una gitanilla me pidió dinero, vi que tenía unos cuantos hermanos