Esta es LA NOCHE

Pascua de Resurrección

No sé por dónde empezar. Ha sido una semana muy intensa, y todavía me queda la
sensación de que esto no ha acabado... no ha hecho más que comenzar.

Ayer celebramos Pascua con las comunidades de nuestra parroquia.
Creo que son ya once, las noches de Pascua, todos juntos,
esperando el Paso del Señor.

Pero quiero hablar de los preliminares, porque casi nos la perdemos. Me explico.
El jueves de madrugada comenzaron Victoria, Inés y Nazareth, con dolor de tripa
y vómitos... tenía toda la pinta de un virus, y cuando les controlamos más o menos esto
-a base de dieta blanda y Primperan -, les tocó el turno, en la madrugada del
viernes al sábado, con los mismos síntomas, a Almudena, Judith, y Rocío...

La casa parecía una enfermería... y una lavandería. No quiero entrar en muchos detalles...
colcha, sábanas, sofa, suelo... lleno de todas esas cosas a medio triturar, que están en los estómagos maltrechos.
Yo me acosté serían las cuatro de la madrugada, pensando que era imposible que al día
siguiente por la noche pudieramos ir a la Pascua.

Así se lo dijimos a los niños. Y me sorprendió cómo se negaron en redondo
a aceptar esta realidad.

- Pero, ¿cómo no vamos a ir a la Pascua? Eso no puede ser...

-Pues si vomitan, que vomiten... (decía Teresa).
Nos llevamos unas bolsas de plástico, y ya.

-Pues que se quede papá con las "malas", decía Nazareth.
(José Manuel no conduce, así que la que obligatoriamente tenía que ir era yo...
por aquello de llevarles...).
Pero los demás, vamos a la Pascua...

Visto el interés despertado, no era cuestión de tirar piedras contra nuestro
propio tejado. Digo esto, porque a comienzos de la semana santa, ya habíamos oido
algún comentario del estilo de: "jo, la pascua, qué larga...", "nos vamos a dormir..."

Así que decidimos que ibamos a hacerlo todo "para ir", es decir, preparar y planchar
la ropa que se iban a poner, comprar los últimos detalles (calcetines, leotardos...),
limpiar zapatos... preparar lo de la bebé (biberón, pañales... )
y buscar dos sacos de dormir para las pequeñas.
Y si dos horas antes, veíamos que las "enfermas"seguían sin levantar cabeza,
pues nos quedábamos.

¡¡¡Y pudimos ir!!!. Verdaderamente la fe -de nuestros hijos- mueve montañas.

Montamos el chiringuito en una sala que se usa como guardería,
alli pusimos los sacos, y allí se quedaron las pequeñas.
Rocío y yo nos turnamos para cuidarlas; en teoría, "hasta que se durmieran".
Cosa que no ocurrió, pues aguantaron como unas jabatas
hasta las cuatro de la mañana.
Justo entonces, cuando ya nos ibamos al restaurante,
cayeron dormidas.

La Pascua tiene "algo" especial.

Eramos unas doscientas cincuenta personas, contando los niños (setenta y cinco,
según nos dijo un seminarista, que había estado organizando el banquete
de Pascua que tuvimos más tarde).

Primero hay un lucernario.
Fuera, en un jardín, ya de noche cerrada, se hizo una fogata y allí el sacerdote
encendió el cirio pascual, signo de la luz de Cristo, que va a iluminar el camino
de todos nosotros en este año nuevo litúrgico que empieza.

Con las velas encendidas, de ese cirio, entramos en el templo que estaba
completamente a oscuras. Otra alegoría, igual que tú y yo estamos a oscuras
cuando nos apartamos del amor de Dios. Y sólo con Jesucristo, somos capaces de ver.

ESTA ES LA NOCHE EN QUE CRISTO
HA VENCIDO A LA MUERTE
Y DEL INFIERNO RETORNA VICTORIOSO...
cantaba el salmista.
ESTA ES LA PASCUA
EN QUE SE INMOLA EL CORDERO.
ESTA ES LA NOCHE
EN QUE FUERON LIBERADOS
NUESTROS PADRES DE EGIPTO.
OH NOCHE MARAVILLOSA,
TU SOLA CONOCISTE LA HORA
EN QUE CRISTO RESUCITÓ.
OH NOCHE REALMENTE GLORIOSA
QUE RECONCILIAS AL HOMBRE CON SU DIOS.

Después hubo nueve lecturas sobre toda la historia de salvación, más las vivencias
personales de los que allí estábamos... y llegó el momento de los niños.

En la Pascua se les hace partícipes de todo este Misterio de la fe.

Ellos también cantaron, preguntaron a sus padres, y les pusieron
en algún que otro aprieto:

¿Por qué esta noche es diferente, de todas las otras noches?,
¿Por qué el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo, son Uno?
¿Por qué Dios vive en mi corazón?

Después vinieron los bautismos por inmersión. Una gozada.
Después la Eucaristía.
Tuve el privilegio de hacer uno de los doce panes ácimos que se consagraron. Para mí
fue todo un regalo del Señor.
Cuando acabó la celebración, realmente Jesucristo había hecho pascua con nosotros.

Sin embargo, hoy, después de todo aquello, veo lo dura de corazón que soy. Que somos.
Volvemos a casa, y sí, Cristo ha resucitado, pero...
estamos hechos de barro. Caemos. Los mayores se pelean...
José Manuel y yo también perdemos la paz.

Me acuerdo de las palabras de San Pablo: "NO entristezcáis al Espíritu Santo".

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Comentarios

  1. Feliz Pascua de Resurrección, Victoria, y enhorabuena por tu familia

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  2. ¡Feliz Pascua de Resurrección! Por cierto, qué fotografías tan bonitas ilustran este post. Un abrazo.

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  3. Ay Victoria no sé por qué me ha costado entrar tanto a tu página pero quería venir a saludarte (tengo que planchar pero decía no hasta que le pueda dejar el mensaje) en primer lugar amiga te deseo junto a tu preciosa familia una maravillosa Pascua de Resurección, espero que los niños se mejoren pronto!!! y respecto a lo que dices, somos una mezcla de berro y luz, la luz ya sabes de donde viene! tenemos que seguir pa delante.
    Muchos cariños.
    (Puse la misma foto que tú para Resurrección, estamos conectadas)Gloria

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  4. Feliz Resurrección querida Victoria.

    Me acordé de ti la noche de la vigilia en la Catedral, había muchísima gente del Camino, las canciones y todo fué maravilloso.

    Un abrazo, bonita.

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  5. Para mi ha sido una pascua de resurrección y alegría. A la vez una cura de humildad, yo camino en Madrid en una única comunidad después de 26 años yo y algunos hasta 35 años. Como siempre con los críos los nervios de ellos, y el ataque de nosotros.

    Esta noche me tocaba como uno de los tres salmistas llevar la mayor parte de la pascua y OH maravillosa obra de caridad del Señor con un pecador que se cree que es algo.

    Me quedé afónico en el pregón pascual. Imagínate que seguí cantando con la voz ronca como un cazallero.

    Mis hermanos de comunidad me decían que había cantado como los angeles.

    Ellos cantan según la voluntad de Dios.

    Al final llegamos a casa a las 07:30 llenos de langostinos y el cordero pascual. En el banquete estuvimos con la parroquia de Fátima y como son tantos años con ellos, como hermanos.

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  6. Feliz Pascua de Resurrección a todos, MªJesús, Eligelavida, Gloria, Guerrera, Julián... y a todos los que se pasen por aquí. Qué bueno es el Señor.

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  7. Me gusta muchísimo la Pascua como se celebra en el Camino y recuerdo con nostalgia cuando ibamos a comer el cordero después.
    ¡FELIZ PASCUA DE RESURRECCION!
    Un beso
    María Jesus

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  8. ¡A mí no me gusta nada la Pascua! Por cierto, ¡de barro estaréis hechos vosotros! ;-)

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  9. Ja,ja,ja...qué gracioso eres Lucifer.
    Claro, de barro estamos hechos nosotros... tú, de oro fino.

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